El gel alcohol no remplaza el lavado de manos.
Con agua y jabón se puede prevenir numerosas infecciones. El simple hecho de lavarse las manos evita el contagio de enfermedades, como la Hepatitis “A” trasmitida a través de alimentos contaminados o de las heces.
La prevención es muy sencilla: En 15 segundos se puede llevar a cabo uno de los mejores y más sencillos programas de higiene. Si la rutina no se repite cada vez que sea necesario y no se produce de manera correcta, las manos se convierten en fuente de gérmenes.
El gel alcohol no remplaza el lavado de manos.
Pese a lo que se cree, los desinfectantes en base a alcohol no son efectivos al eliminar algún virus. Sin embargo, el jabón sí es veloz para destruir la cápsula de estos microorganismos; es decir, disuelven su envoltura externa y le quita la capacidad de infección.
¿Cómo lavarse las manos?
Moja tus manos con agua corriente y luego enjabónate. Restriega bien tus manos, dedos y hasta la muñeca, luego enjuágate con agua y finalmente seca tus manos con una toalla o papel toalla, nunca con tu ropa o cabello.
Momentos claves para el lavado de manos:
- Antes de manipular alimentos y con frecuencia durante su preparación
• Antes de comer
• Después de ir al baño
• Después de manipular carnes rojas o de ave crudas
• Después de hacer labores de jardinería o tocar la tierra o el suelo
• Después de cambiar el pañal a un bebé
• Después de sonarse la nariz
• Después de tocar basura
• Después de manipular sustancias químicas (incluidas las utilizadas para limpiar)
• Después de jugar con mascota