Rendimiento: 20-25 galletas Tiempo preparación: 5 minutos Tiempo de cocción: 30 minutos.
Lo que necesitarás
- 1 taza de harina de avena
- ½ taza de harina de almendra
- 6 cucharadas de azúcar de dátiles
- 2 cucharadas de linaza molida
- ½ cucharadita de polvo de hornear
- ¼ cucharadita de bicarbonato de sodio
- ½ cucharadita de canela molida Pizca de sal marina
- ½ taza de leche sin lácteos sin azúcar
- ¼ taza de mermelada endulzada con fruta
Procedimiento
- Precalienta el horno a 350 grados F.
- Cubre una bandeja para hornear con papel para hornear.
- En un envase hondo, mezcla la harina de avena, la harina de almendra, el azúcar de dátiles, la linaza, el polvo de hornear, el bicarbonato de sodio, la canela y la sal.
- Agrega la leche basada en plantas y usa una cuchara o tus manos para mezclar bien la masa. Debe ser espesa, pero no demasiado pegajosa. Si está demasiado húmeda, agrega un poco más de harina de avena y mezcla bien.
- Saca alrededor de 1 cucharada de masa y forma bola.
- Coloca sobre la bandeja para hornear cubierta con papel para hornear y continúa con la masa restante, colocando las bolas a una distancia de aproximadamente 1 a 2 pulgadas.
- Presiona el centro de cada galleta con el pulgar para crear un pozo para acomodar la mermelada.
- Rellena cada “huella” de las galletas con ¼ cucharadita de mermelada.
- Hornea las galletas hasta que estén ligeramente doradas, aproximadamente 30 minutos.
- Transfiere la bandeja para hornear a una rejilla para enfriar durante unos minutos.
Consejos útiles
- Puedes sustituir la azúcar de dátiles con azúcar de coco o sirope de yacón.
- Si necesitas asegurarte de que estas galletas no contengan gluten, puedes comprar harina de avena que esté etiquetada como sin gluten o preparar tu propia harina en casa, triturando avena sin gluten en la licuadora o procesador de alimentos.
- Para evitar que se pegue la masa a las manos, ten un envase pequeño con agua disponible para humedecerte las manos antes de formar las bolitas y presionar la huella digital.
- Estas galletitas son preferibles recién sacadas del horno. Si las guardas en el refrigerador para consumirlas luego, te sugerimos calentarlas por unos minutos en el horno antes de servirlas.
- Para preparar la harina de avena, muele avena en hojuelas en una licuadora o procesador alimentos.